domingo, 15 de junio de 2014

POEMAS SIN DIOS... (1993)






Estoy intentando "liberarme" de trabajos realizados hace años y que, tal vez, nunca sean compartidos. En la necesidad de hacerlo he pensado editarlos artesanalmente en formato PDF para que, quien lo desee, lo "baje" de la web y lo pueda leer.

Esta vez incluyo un trabajo agrupado en 1993 con testimonios del interior de un hombre que había perdido un punto de referencia... aunque, visto a la distancia, andaba (como el hijo pródigo) malgastando la herencia... De cualquier forma, creo, algún valor literario tiene, de manera que espero que sea recibido con condescendencia por los amigos y amigas que lo deseen conocer.
Adjunto el link para su decarga...   Gracias

Luis C. Aguirre

Poemas sin Dios (1993)

jueves, 29 de mayo de 2014

OTRO CUADERNO




Estoy intentando "liberarme" de trabajos realizados hace años y que, tal vez, nunca sean compartidos. En la necesidad de hacerlo he pensado editarlos artesanalmente en formato PDF para que, quien lo desee, lo "baje" de la web y lo pueda leer. Es una copia fotográfica del cuaderno en letra cursiva. Hay trabajos incompletos y fragmentos originales de cuentos que, luego tuvieron otro destino. Espero que sepan disculpar la vanidad de compartirlo tal cual salieron de la birome.

A la espera de que este trabajo, ya añejo, tenga recepción entre los amigos, adjunto el link para su decarga...

Gracias

Luis C. Aguirre



OTRO CUADERNO (facsímil del original)(Poemas 1996-1997)

sábado, 12 de abril de 2014

UN NIÑO MITAD DUERME

Gracias a: httpswww.facebook.comartpeople1fref=photo


Un niño
mitad duerme
mitad vela;

mitad juega
mitad escapa;

mitad sonríe
mitad teme.

Un niño
duerme solo
en la ciudad,
mitad niño
mitad fugitivo...

y nadie se
avergüenza

(ni mitad vergüenza).



miércoles, 15 de enero de 2014

ORACIÓN POR UN POETA EN ENERO

gracias por la vela a: http://ciegocaminante.blogspot.com.ar



Cuando muere un poeta
es como que una cuerda
del arpa de la vida
hace "ting" para siempre.

Queda un eco
que cada vez que algún curioso
(o un estudiante obligado
o una mujer enamorada)
abra el amarillento libro,
continuará vibrando.

Pero no se alegren
los insensibles
ni sufran demasiado
los anhelantes,
hay más poetas.

En cada esquina,
en cada cruce de caminos,
al lado de los tornos,
en la cabina de un tractor,
barriendo las calles,
cambiando bebés,
cuidando ancianos.

Hay poetas en los buques pesqueros,
en las carpinterías
y los bares.

Uno ha partido para siempre.
Recuerden su poema,
ese que fue escribiendo
durante su tiempo
y lo verán volar cerca
susurrando su pena y su amor.